Tasas de interés fijas vs ajustables.
Cuando se adquiere una hipoteca, usted tendrá la oportunidad de elegir entre dos tipos básicos de hipoteca: una hipoteca a tasa fija o una hipoteca a tasa variable, llamada ARM en inglés (por las siglas, Adjustable Rate Mortgage). Por lo tanto, ¿Cuál es la diferencia entre una hipoteca a tasa fija y una a tasa variable? y ¿Qué factores afectan al monto que usted paga cada mes? Eso es exactamente lo que explicaremos.
¿Qué afecta a las tasas de interés?
Antes de explorar los dos tipos de hipoteca, es importante entender que afecta a las tasas de interés, debido a que esto puede tener un gran efecto en el monto que usted gasta en el pago mensual de su hipoteca.
En Estados Unidos, las tasas de interés las establece el Sistema de la Reserva Federal. Una serie de factores pueden afectar las tasas de interés, incluyendo el clima político nacional e internacional, la bolsa de Wall Street y los mercadores financieros globales y la economía, tanto a nivel nacional como global.
Las tasas de interés se usan como un método para regular la economía. Bajar las tasas de interés puede ayudar a prevenir una recesión haciendo que sea menos costoso prestar dinero, por ende, fomentando la actividad económica. Por el contrario, cuando las tasas de interés son más altas, se vuelve más costoso prestar dinero, lo que causa que la economía se contraiga. Por lo tanto, el aumento de las tasas de interés se usa como un mecanismo para prevenir la inflación.
Estos son los factores que causan que las tasas de interés fluctúen con el paso del tiempo, afectando así el pago mensual de su hipoteca.
¿Qué es una hipoteca a tasa fija?
Con una hipoteca a tasa fija, usted asegura una tasa de interés cuando usted obtiene el préstamo hipotecario, de tal modo que si las tasas de interés están a 3.5% cuando usted obtiene el préstamo, esta es la tasa que usted puede esperar pagar durante el plazo completo del préstamo.
Con una hipoteca a tasa fija, el pago mensual siempre es el mismo. Esto es ventajoso debido a que la estabilidad de una hipoteca a tasa fija significa que usted siempre sabrá cuanto deberá apartar mensualmente para hacer el pago de su préstamo hipotecario. En el mundo de la planificación financiera, la certeza y la predictibilidad son cosas buenas.
La desventaja es que las tasas de interés del país pueden caer muy por debajo de la tasa de interés que usted aseguró cuando obtuvo el préstamo. Sin embargo, es posible refinanciar su préstamo hipotecario, obteniendo una tasa menor. Hay algunos costos asociados al proceso de refinanciamiento, pero si lo programa con tiempo, usted puede disfrutar de unos ahorros considerables.
¿Qué es una hipoteca a tasa ajustable?
Una hipoteca a tasa ajustable, también conocido en Estados Unidos como un préstamo ARM, es completamente diferente a un préstamo a tasa fija puesto que usted no “asegura” una única tasa de interés. En su lugar, la tasa de interés cambia con el paso del tiempo, reflejando los cambios que suceden a nivel nacional, por lo que, si la Reserva Federal aumenta las tasas de interés, usted pagará un poco más, mientras que si disminuyen las tasas de interés, usted pagará un poco menos.
La cantidad de variación que usted puede esperar ver varía dependiendo del monto total prestado por el préstamo hipotecario. Las tasas de interés se calculan por medio de porcentajes, de manera que cuando usted haga los cálculos se haga evidente el potencial de la variación. Por ejemplo, el 1% de un préstamo hipotecario de $50,000 sirve para $500, mientras que el 1% de $750,000 es $7,500.
Una hipoteca a tasa ajustable puede llevar a una ejecución hipotecaria si los pagos exceden lo que usted se puede permitir. Lo ideal es, que usted le dé un vistazo a los datos históricos de las tasas de interés y calcule cuánto gastaría en un pago mensual de un préstamo hipotecario a tasa ajustable en caso de que las tasas de interés llegasen a un determinado máximo. Usted debe ser capaz de poder pagar cómodamente el “peor de los casos” de manera indefinida. Si usted cree que sería incapaz de pagar esta cifra, entonces puede que sea mejor obtener un préstamo hipotecario a tasa fija.
Las hipotecas a tasa ajustable pueden funcionar bien para aquellos que viven de sus ahorros, ya que las tasas de interés también determinar cuánto puede ganar de interés sobre sus ahorros. De esta manera, cuando las tasas de interés estén bajas, usted ganará menos intereses sobre sus ahorros, pero el pago de la hipoteca también será menor. Asimismo, cuando el pago mensual de la hipoteca aumenta debido a tasas de interés más altas, es poco probable que usted se encuentre con problemas puesto que también estará ganando más intereses sobre sus ahorros.
La menor tasa de interés en una hipoteca a tasa fija tiende a ser algo mayor que la menor tasa de interés en una hipoteca a tasa ajustable, lo que puede hacer que la segunda opción sea más atractiva en algunas situaciones.
En un contexto económico en el que las tasas de interés son altas (o en lo que se cree es el máximo nivel), puede ser ventajoso optar por un préstamo hipotecario a tasa ajustable, dado que los pagos mensuales serán menores que en un préstamo hipotecario a tasa fija y los pagos probablemente disminuirán con el tiempo. A fin de cuentas, usted puede optar por refinanciar a un préstamo a tasa fija para asegurar una tasa menor una vez que parezca que las tasas de interés hayan tocado fondo.
Es importante tener cuidado al adquirir un préstamo hipotecario a tasa ajustable debido al potencial de atrasarse en los pagos si las tasas de interés hacen que su pago mensual aumente considerablemente, lo que puede llevar a una situación incómoda, puesto que una vez que se atrasa en sus pagos, puede ser difícil refinanciar a un préstamo a tasa fija.