Bancarrota

Evitar la bancarrota refinanciando la deuda

Bancarrota

La bancarrota es un proceso legal presentado en un tribunal por un abogado de bancarrota (bankruptcy attorney en inglés). Este abogado de bancarrota, por lo general, representa a la persona que debe dinero, aunque con menor frecuencia uno o más acreedores pueden presentar una demanda. Cuando un tribunal de bancarrota aprueba una solicitud de bancarrota, se confirma que el deudor no puede pagar la deuda pendiente. En este caso, sus activos se valoran y a veces se utilizan para pagar a sus acreedores a prorrata.

Si se enfrenta a la bancarrota un prestatario con problemas debe buscar el asesoramiento de un bufete de abogados antes de responder a este tipo de demandas. La ley de bancarrota no es sencilla y los diferentes estados tienen diferencias sutiles en sus leyes, a pesar de que las oportunidades a los individuos siguen siendo las mismas, en principio. El Capítulo 7 del Código de Bancarrota (Chapter 7 - Bankruptcy Code) prevée la liquidación total de los activos, lo cual puede no ser lo mejor para los acreedores cuando no queda dinero. Por esta razón, las partes pueden acordar un tratado del Capítulo 13 en relación al cual los convenios de deuda que reducen o extienden los plazos de pago extendidos se confirman.

Después de presentar una bancarrota del Capítulo 7 o una bancarrota del Capítulo 13, la vida de un prestatario ya no será la misma. Su informe de crédito se actualiza y puede que ya no sea capaz de volver a pedir dinero. Incluso cuando esta entrada caduque, sigue siendo obligatorio admitir la bancarrota si un prestamista lo pregunta y es por esto que los consumidores deben evitar la bancarrota cuando sea posible. Un estigma también unido a la bancarrota es que los hogares en bancarrota habitualmente se venden a precios más bajos.

Habitualmente se siembran las semillas de la bancarrota porque los propietarios de hogares no entienden que las tasas hipotecaias pueden subir cuando las condiciones económicas cambien. Esto significa que un préstamo que inicialmente era económico, de repente requiere pagos altos que simplemente no se pueden permitir. Cuando eso ocurra, deben investigar oportunidades de refinanciación que pueden ayudarles a mantener sus hogares y evitar malos informes de crédito también. Esta es una solución mucho mejor que presentar una bancarrota.